Gracias a dos plataformas informáticas creadas por un grupo de investigadores de la UBB – y destacados profesionales externos – que son parte de un proyecto pionero del Departamento de Ingeniería Industrial, se apunta a mejorar los procesos y a la generación de capacidad innovadora en los profesionales de la Salud Pública.
Instalar capacidades de innovación en los profesionales de la Salud es lo que busca el proyecto: Metodología integrada para la gestión de conocimiento e innovación en la Salud Pública, utilizando herramientas de Ingeniería, desarrollado por un grupo de investigadores del Departamento de Ingeniería Industrial de la Universidad del Bío Bío, integrado por los académicos Carlos Torres, Freddy Troncoso, Juan Maldonado, el ingeniero civil industrial Cristián Guajardo, y liderado por el docente Arnaldo Jélvez.
Con esta iniciativa, que finalizará en enero próximo, financiada conjuntamente por el Comité de Desarrollo Productivo Biobío y la UBB, se logró implementar y desarrollar una metodología integrada en gestión del conocimiento para innovar en los procesos y servicios de la Salud Pública. Así, a través de talleres y de las plataformas informáticas Educa -que brinda material de estudio- y Gestión en la Innovación -que permite la interacción con sus creadores por medio del desarrollo de un proyecto real asociado a un recinto de salud-, los profesionales de Salud adquirieron, de manera teórica y práctica, nuevas habilidades blandas y competencias técnicas tendientes a mejorar sus capacidades, las que fueron posteriormente certificadas por medio de evaluaciones.
La idea del proyecto nace del trabajo desarrollado por los investigadores en el ámbito de la telemedicina en los hospitales y centros de salud primaria, pertenecientes a la red pública, donde conocieron la realidad que enfrentan diariamente quienes allí trabajan. “En la Salud Pública se atiende cerca del 80 por ciento de la población. La evaluación de Satisfacción Usuaria en el sistema privado es mejor que en el sistema público, donde los profesionales enfrentan una gran presión social. Estos indicadores nos mostraron que, a través de herramientas de Ingeniería Industrial, podemos mejorar los procesos y apoyar al recurso humano”, explica Arnaldo Jélvez.
Cristián Guajardo, por su parte, destaca que el compromiso de los funcionarios es clave para lograr la innovación en Salud. “La falta de capacidad innovadora en esta área está asociada a las zonas de confort, a la resistencia al cambio y a la carencia de liderazgo. Si se motiva mejor a las personas con buenas ideas, podrían presentar proyectos que vayan en beneficio del centro de salud y de los pacientes”, señala.
Actualmente, el Departamento está abocado a desarrollar nuevos proyectos en la línea de la innovación. Además, han realizado trabajos, apoyados por alumnos de intercambio, en el área de la telemedicina en Francia, España y México, y prontamente planean replicarlo en EE.UU.