El 50 % de los hombres mayores de 50 años sufre una alteración hormonal similar a la menopausia que las mujeres comienzan a vivir, generalmente, a esa misma edad.
Se trata de la andropausia -o Deficiencia de Andrógenos en el Hombre Adulto- que es provocada cuando comienza a declinar la secreción de testosterona debido a factores propios del envejecimiento. Este fenómeno fisiológico altera radicalmente la calidad de vida. Sin embargo, no afecta a todos los hombres y quienes la experimentan la sienten de distinta manera.
Los principales síntomas son la disminución del deseo y de la potencia sexual, decaimiento y fatiga muscular. Se diferencia de la menopausia en que el hombre rara vez presenta bochornos, salvo en los casos en que la producción de testosterona se detiene bruscamente.
Otros síntomas que también aparecen son la disminución de la altura. Los hombres se ponen quejumbrosos, pierden el interés por su trabajo o por sus hobbies, tienen trastornos del sueño y tienden a estar deprimidos. La presencia de la andropausia se detecta a través de estudios clínicos que consisten en un examen físico para determinar la disminución del vello corporal y barba, de la masa muscular, de la talla y el aumento del tejido adiposo y, en algunos casos, la disminución del tamaño testicular. Éstos se complementan con estudios diagnósticos como hemogramas, densitometría ósea y determinaciones hormonales.