Propuestas de líderes gremiales: Claves para sobrevivir a la crisis

/ 18 de Noviembre de 2008

El aumento inflacionario y el alza del dólar; la caída del precio en los commodities y la crisis energética; la inminente recesión de Estados Unidos y la contracción económica mundial. Todos son factores que afectan el rendimiento de nuestra economía. Manejarlos a favor del desempeño del país es fundamental para que Chile mantenga su posición de liderazgo en América Latina. Empresarios, dirigentes gremiales y representantes del mundo académico plantean en este reportaje sus propuestas para mejorar la competitividad y sobrevivir en el actual panorama mundial.
El escenario económico mundial sigue tambaleando. La crisis bursátil se transformó en un trance económico. Todos los países se enfrentan al dilema de crecer o sumergirse en una recesión. Ello, porque según las proyecciones del Fondo Monetario Internacional, el nivel de contracción en las economías desarrolladas alcanzaría un 0,3%, mientras que su estimación sitúa al crecimiento global en el orden del 2,2% para el 2009. Las expectativas para Latinoamérica tampoco son alentadoras. El próximo año la región caería de un 5,6% de crecimiento registrado el 2007 a un 2,5%. El descenso es elocuente si recordamos que la cifra se empinó al 4,5% durante el 2008.
Con este panorama, los Estados comienzan a ver sus niveles de competitividad en aprieto. Para Chile, el desafío es mayor porque de acuerdo con el último informe del Foro Económico Mundial, nuestro país mantuvo su liderazgo en la región, pero cayó del lugar 26 al 28.

Diagnóstico de la competitividad

El índice de competitividad de Chile se divide en cuatro factores: desempeño económico, infraestructura, eficiencia de gobierno y eficiencia de empresas.
Sobre el desempeño económico, Chile pasó del puesto 28 al 43, debido a que la actividad económica del 2007 fue menos dinámica y la inflación fue especialmente alta. Respecto a la eficiencia del Gobierno, Chile mejoró su ubicación desde el lugar 16 al 9. El manejo de la política fiscal y monetaria justifican la mejor posición en este ranking. Por último, la eficiencia de las empresas cayó del lugar 21 al 22, mientras que la infraestructura subió del puesto 39 al 38.
Chile está mejor posicionado que países como Panamá (58) y Costa Rica (59), pero la diferencia es estrecha. Por eso, quisimos conocer qué medidas se pueden tomar para mejorar la competencia del país. Conversamos con los representantes de la industrias pesquera, lechera, agrícola, forestal y acuícola y también con los vinculados a los sectores de la construcción, el turismo, servicios y del mundo académico, quienes en este reportaje dan cuenta de sus propuestas para mejorar la competitividad en sus respectivos ámbitos. Estos planteamientos pueden ser la base de ese gran salto que el país y las regiones esperan dar para superar los embates de la actual crisis internacional.

Infraestructura y oportunidad

En el ámbito forestal, Jorge Serón, Presidente Regional de la Corporación de la Madera, CORMA, propone abordar sustanciales mejoras en la infraestructura vial, portuaria y ferroviaria. Sostiene que es imperativo concretar el Plan de Infraestructura para la Competitividad del Ministerio de Obras Públicas que considera invertir sobre los US$ 1.500 millones en diversos proyectos viales que “contribuirán directamente sobre la competitividad del sistema productivo en su conjunto”.
Entre sus propuestas destaca la necesidad de aumentar el estándar de construcción en las rutas a 60 toneladas, debido al aumento de carga que la industria está experimentando. Esta modificación implica el uso de un equipo rodante, tipo Bitrén, que es un transporte compatible con la nueva vialidad propuesta y que actualmente está presente en los países desarrollados.
En materia portuaria, avala los planes de inversión que existen en los 9 puertos de la región y que superan los US$ 220 millones. Las iniciativas ampliarán la capacidad de transferencia del Sistema Portuario, llevándola a 35 millones de toneladas anuales.  “El sector privado contribuirá directamente con la consolidación de la región como líder nacional de la industria portuaria y entregará a los exportadores la tranquilidad de que sus productos podrán seguir siendo embarcados de forma eficiente y competitiva”, sostiene. Agrega que dada la naturaleza de los volúmenes y tipos de cargas que son movilizados por la zona, es imprescindible disponer en el corto plazo de un nuevo puente sobre el río Bio Bío.
Jorge Serón también aborda la relación que tiene la industria con las pequeñas y medianas empresas (Pymes). Señala que es necesario mejorar las oportunidades que ellas tienen para desenvolverse, especialmente cuando las condiciones económicas son cambiantes. Plantea que la calificación de las pequeñas y medianas empresas en tiempos de turbulencias económica, y financieras en el mundo deben ser examinadas. Serón aborda este aspecto porque la gran mayoría de las Pymes del sector superan el tramo que les permite tener acceso a algún tipo de beneficio para la innovación y desarrollo productivo, es decir, ventas netas anuales inferiores a 100.000 UF. “Sería muy importante que las autoridades de CORFO revisen este tipo de estructura de acuerdo con los tiempos, reclasificando a las empresas como tales, tomando como parámetro la producción neta”.
Finalmente, afirma que las regulaciones ambientales y normativas laborales podrían ser legisladas con mayor flexibilidad de tal forma que se ajusten a las realidades de cada sector productivo y los tamaños de las empresas con el objetivo de que no impliquen aumentos en sus costos que lo pueden hacer salir del mercado.
“Es el caso de la reciente ley 20.281 sobre salario base y semana corrida que según la interpretación que se dé puede implicar incrementos no esperados en los salarios, poniendo en riesgo la estabilidad de las pequeñas empresas. Lo mismo ocurre con la nueva ley 20.271 sobre jornada de trabajo para choferes, que no se ajusta a la realidad de quienes laboran en el sector forestal, especialmente en el tema de tiempos de conducción y de espera”, concluye.

Sustentabilidad y tecnología

La industria pesquera extractiva es otro de los sectores productivos que se ha visto afectado por los vaivenes de la crisis internacional. Rodrigo Sarquis, Presidente de Asociación de Industriales Pesqueros, ASIPES afirmó que la competitividad del sector está dada por cuatro variables fundamentales.
En primer lugar, sostuvo que es necesario acceder a pesquerías sustentables. Debido a que la industria asume grandes inversiones para el desarrollo de la actividad en el mar y la posterior elaboración de productos para el consumo humano, “nos interesa que basado en la investigación se fijen cuotas que sostengan las distintas pesquerías en el largo plazo”.
Señaló que el tipo de cambio es un factor clave para toda actividad exportadora. Sarquis sostiene que si bien Chile es un país muy regulado, tiene varias ineficiencias en esta materia y en otras áreas que ponen a la industria cuesta arriba, especialmente en momentos de crisis. “A mayor ineficiencia, mayor es el tipo de cambio que requiere la industria para su normal funcionamiento”. Explica que “mientras mayor sea la carga tributaria, mientras mayores sean las exigencias medio ambientales, mientras más regulaciones laborales tengamos”, más complejo es el escenario para el sector.
Entre los otros planteamientos que Rodrigo Sarquis menciona está el acceso a la tecnología, herramienta que debe ser aplicada en los distintos procesos productivos. “Ser más eficiente es una obligación en un mundo más competitivo. Por eso es vital poder contar con más y mejor tecnología”.
Aclara que la tecnología por sí misma no es suficiente. Explica que para sacarle un buen provecho es fundamental el capital humano. En este sentido, afirma que las personas deben estar muy bien educadas y capacitadas. “Hay un campo muy grande donde trabajar en esta materia en el país, porque todos los esfuerzos que hasta ahora se han hecho -que no son pocos- no son suficientes”.
Sarquis está convencido de que al avanzar en estos cuatro campos en forma conjunta, “podremos proyectar nuestro sector al futuro de manera exitosa”.

Demanda permanente

El mercado de los commodities es uno de los blancos donde la crisis financiera está teniendo importantes impactos. El crudo, la harina o el aceite de pescado, por ejemplo, registran a octubre caídas cercanas al 10%. Este escenario es sensible especialmente en la industria salmonera.
Carlos Odebret, representante de SalmonChile en la Región de Los Lagos, mantiene una visitón positiva respecto del desempeño del sector frente a la actual crisis internacional. Afirma que lo único claro es que el actual escenario es incierto, “con mucho de especulación local y sobrerreacción”. Puntualiza que el sector tiene dos situaciones que enfrentar, ya que además del escenario económico mundial -que ha generado restricciones a la liquidez por la reacción financiera- deben hacer frente a la coyuntura sanitaria.
Sin embargo, antes de profundizar sobre las medidas para ambos temas, Odebret sostiene que es importante comprender cómo se visualiza el mercado mundial del salmón. “El salmón o el negocio de las proteínas seguirá siendo un estupendo negocio, porque la población está en aumento, la necesidad de usar una dieta sana seguirá siendo la tendencia y el consumo de productos del mar seguirá creciendo”.
Explica que es en este sentido que el precio del salmón ha tomado una tendencia al alza. Agrega que otro escenario favorable para la industria es el actual tipo de cambio. De ahí que para Carlos Odebret, las medidas a implementar para mejorar la competitividad de esta industria están relacionadas con el propio sector. “Hay que apuntar a los procesos internos; es decir, apretar el cinturón en los costos, pero haciendo las inversiones necesarias para resolver la coyuntura sanitaria”.
Para lograr lo anterior, insiste que es fundamental la facilitación de los bancos ya que son las inversiones las que garantizarán el desarrollo para satisfacer la demanda por salmón en el mundo.

Potencia alimentaria

Convertir a Chile en una potencia alimentaria es uno de los desafíos del país. Este objetivo impone contar con una estrategia que resista la actual contracción del consumo en los mercados de destino de las exportaciones del sector. Gastón Caminondo, Presidente de la Sociedad de Fomento Agrícola de Temuco, sostiene que los agricultores han sabido sortear momentos y escenarios delicados y ésta -dice- “no será la excepción”. Sin embargo, reconoce que el escenario que enfrentan en la actualidad se caracteriza por mercados de granos muy volátiles y elevados costos de energía y de fertilizantes. Para resistir esta coyuntura, explica que es necesario recurrir a “mecanismos que den cierta estabilidad a los precios, utilizar más coberturas, más capacitación en todo tipo de procesos, más calidad en la gestión y mayor innovación”.
Agrega que bajo las actuales condiciones, los agricultores tendrán que mantener abiertos los ojos y estar atentos a escuchar a los mercados de consumidores a nivel mundial. “Sobre todo será necesario conocer las experiencias exitosas, estén donde estén. La asociatividad es ahora más importante que nunca”, enfatiza.
Caminondo apunta al rol que en esta crisis le compete al Estado, ya que “tendrá también que ponerse a tono en materia de educación rural, de capacitación agropecuaria y de legislación laboral especial para las Pymes agrícolas”.
Concluye que la investigación es otra arista que se convierte en una herramienta fundamental para mejorar la competitividad del país en este ámbito. Ésta debe ser más pertinente a las necesidades de los empresarios y sobre todo en cuanto a las comunicaciones viales y de Internet en el campo “donde presentamos un severo atraso”.
El sector lechero, es otro importante protagonista. Pedro Joustra, Gerente del Consorcio Lechero, explica que el sector enfrenta la crisis desde una mejorada situación competitiva. Recuerda que antes de la crisis, el aumento del consumo a nivel interno obligó a importar leche desde un mercado mundial con altos niveles de distorsión para satisfacer las necesidades del mercado local, sin embargo en la actualidad -y a partir del sostenido crecimiento de la oferta de leche fresca- la producción nacional de lácteos ha aumentado más allá de lo que el mercado interno es capaz de consumir. “Esta dinamismo en la producción generó volúmenes que determinan la necesidad de destinar parte de ella hacia el mercado de exportación, hecho que se ha incrementado con fuerza en los últimos años”.
Aclara que a pesar del panorama internacional, el sector enfrenta pruebas contundentes a su capacidad competitiva, entre ellas destacan las importantes alzas en el valor de los insumos necesarios para la producción de leche, que se enfrentan con bajas en el precio pagado a productor, concordantes con la caída de precios de los commodities. Esta situación motiva a que en el Consorcio Lechero -que reúne productores, empresas procesadoras, empresas de servicios y entidades tecnológicas- concentren sus esfuerzos para hacer de Chile un país lechero desarrollado y posicionado en el mercado lácteo global.
“El Consorcio Lechero apuesta por la innovación tecnológica como herramienta para avanzar en términos de competitividad”, comenta Joustra. Agrega que hoy trabajan en la construcción de las soluciones a los desafíos a los cuales se enfrentará el sector lácteo en los próximos años. Buscan conocer, por ejemplo, cuáles son los factores estructurales determinantes en el crecimiento del rebaño lechero en nuestro país. Además, apuntan a mejorar, en términos sistémicos, la eficiencia productiva y económica de sus explotaciones, de manera de lograr, entre otros aspectos, optimizar la producción, calidad y utilización de forrajes para mejorar la alimentación del rebaño y con ello la calidad de la leche. “Un menor costo de producción, maximizando así la capacidad de insertarse en el mercado internacional en una mejor posición competitiva” confirma.
La formación y desarrollo de recursos humanos es una arista que Joustra aborda en sus planteamientos. Propone mejorar la productividad y formación de especialistas, técnicos y operarios del sector “para hacerlos más pertinentes a la realidad comercial, productiva, tecnológica y científica del sector lácteo”, puntualiza.
Reconoce que la apuesta del Consorcio Lechero es alcanzar estándares competitivos de excelencia mundial. Por ello, las acciones descritas sumadas a otras como la gestión ambiental mediante tecnologías para la sustentabilidad del sector lácteo buscan contribuir al logro de ese objetivo.

Condiciones de mercado

Las estrategias para hacer frente a la situación internacional son claras en el sector inmobiliario. Mauricio Minck, Presidente de la Delegación Temuco de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), reconoce que antes de que la Presidenta hiciera los anuncios de los subsidios para el sector inmobiliario, la Cámara dio a conocer a nivel nacional una serie de medidas que precisamente apuntaban a mejorar la capacidad de las personas para acceder a un crédito hipotecario y a incentivar la compra de inmuebles entre quienes disponen de mayores recursos.
“Hemos recibido con gran satisfacción el anuncio del conjunto de estímulos económicos que hizo la Presidenta Michelle Bachelet, algunos de los cuales favorecen directamente la compra de viviendas y son concordantes con las medidas que, para esos efectos, solicitamos como gremio”, comenta. Explica que en particular, valora que “nos hayan escuchado y que coincidan con nuestra visión. Gracias a esta visión compartida, esperamos que se comience a reactivar la industria inmobiliaria y así se proteja el empleo de miles de chilenos”.
Sin embargo, Minck señala que lo anterior podría complementarse con otras dos iniciativas que se incluían en la propuesta del sector. Una de ellas se relaciona con la postergación de la entrada en vigencia de los nuevos límites al crédito para la construcción de viviendas, mientras que la segunda con la posibilidad de deducir de la base imponible los dividendos hipotecarios. “Pero es indudable que las medidas anunciadas por el Gobierno tienen la virtud de transmitir confianza a las personas y ser un estímulo para que las personas concreten su decisión de compra y puedan cumplir con el sueño de la casa propia”, enfatiza.
En el área de los servicios, Jorge Atton, Gerente General de Telefónica del Sur, analiza las variables que inciden directamente en la gestión de las empresas. Coincidió con la necesidad de adoptar una normativa de flexibilización laboral como una manera de estar preparados ante un eventual aumento del desempleo. “La única forma que las empresas contratemos personal y no hagamos ajustes dolorosos, es teniendo flexibilización en las contrataciones para poder seguir en mejor forma el comportamiento del mercado”, comentó.
“El Gobierno debe ser creativo para transformar esto en un círculo virtuoso, si no vamos a crecer a menos del 2% anual y convertirnos en los colistas de América Latina. Y lo que es peor, se va  a perder la posibilidad de transformar esta crisis en una oportunidad para retomar el crecimientos del país por sobre el 5% anual”.
Atton planteó que una medida a implementar es el acceso a créditos a tasas preferenciales para las Pymes. Enfatiza que la propuesta es que este beneficio “llegue efectivamente a ellos y no se queden en la burocracia”. Explica que como las medianas y pequeñas empresas recurren a la banca para financiar su capital de trabajo, la falta de liquidez del sistema las perjudica ampliamente. Primero porque las empresas de las que son proveedoras retrasan los pagos, por lo tanto deben buscar otras alternativas como el factoring a tasas de interés muy altas. “A la vuelta de un par de meses no pueden pagar y entran en cesación de pagos, deben despedir gente y eso es grave ya que son las principales empleadoras”.
Sostiene que al aumentar la sensación de inestabilidad laboral, las personas no consumen y se produce una contracción de la demanda; es decir, se entra rápidamente en recesión. “Incluso el Banco Central debiera ser más agresivo y debiera bajar la tasa al menos en un punto en los próximos tres meses. La inflación se controla sola”, afirma.
El ejecutivo postula que el Gobierno debiera implementar un subsidio a la demanda -como los adoptados durante la crisis asiática- y activar el plan de concesiones a fin de que aumente la actividad de construcción de infraestructura.

Capital humano

La contracción del consumo comienza a afectar también a actividades como el turismo. Así se desprende de los últimos datos entregados por el Servicio Nacional de Turismo, Sernatur, donde los turistas de Norteamérica disminuyeron en un 11,7% durante el último trimestre en comparación a misma fecha del 2007. Los visitantes de Europa lo hicieron en un 1,6% menos. Un dato decidor es que mientras la tasa de crecimiento del sector superaba el 10%, la proyección para el 2008 a penas se acerca al 5%.
Pero, aún cuando la cantidad de turistas descienda, será necesario mejorar la oferta para que Chile siga siendo considerado un destino atractivo. En este sentido, Gastón Krauss, Presidente del Consejo Superior de Turismo de Puerto Montt y Presidente del Programa para el Mejoramiento de la Competitividad del sector, explica que una de las principales medidas que adoptar se relaciona con la capacitación y profesionalización de los actores que intervienen en la actividad. “Es imprescindible capacitar en el idioma inglés a todos aquellos que puedan tener contacto con los turistas, vale decir desde Carabineros hasta el agente de viajes que atiende en su oficina”.
Por parte del Estado, plantea que es necesario propiciar políticas públicas que permitan al turista sentirse grato y con la información necesaria para desplazarse y elegir los lugares que visitar. “Es preciso mejorar la señalética, tener ciudades limpias, calles seguras y oficinas de información que atiendan los siete días de la semana los 365 días del año”, comentó.
Krauss agregó que es tremendamente necesario contar con estadísticas que permitan conocer datos relevantes de los turistas, entre ellos el lugar de procedencia y gasto promedio. Esta información se obtiene en la actualidad de manera parcializada y se recibe con mucho retraso.
Otro mecanismo para implementar se relaciona con una potente campaña de promoción que permita dar a conocer el país y sus regiones en todo el mundo. “Es importante ir a los lugares desde donde sale la mayor cantidad de turistas y averiguar in situ cuáles son los intereses que considerar cuando se deciden por los destinos que quieren visitar”. Señala que conocer sus expectativas permitiría estar mejor preparados para recibirlos. Finalmente considera sumamente importante que las Pymes turísticas reciban el apoyo de créditos a largo plazo para desarrollar sus planes de negocios y mejoramiento de la oferta turística.

Estrategia académica

Parece evidente que la profesionalización del capital humano es un factor transversal en las distintas actividades productivas. En esta visión coinciden también Héctor Gaete, Rector de la Universidad del Bío Bío (UBB), y Manfred Max-Neef, Director del Instituto de Economía de la Universidad Austral de Chile (UACH). Ambos representantes del mundo académico analizaron de manera integral las alternativas que, desde este ámbito, pueden ser útiles para mejorar la competitividad del país.
“El escenario mundial tiene y seguirá teniendo turbulencias porque éstas forman parte del funcionamiento de la economía global”, explica el Rector de la UBB para quien la clave está en tener un sistema con alta capacidad de adaptación. “Hay que comprender que la competitividad se fundamenta en dos pilares esenciales: la capacidad de integración de los actores en torno a una visión y misión común y a unos valores  compartidos”.
Explica que las instituciones y empresas buscan fortalecerse a partir de la definición de estos elementos, modalidad que también deben aplicar los territorios. “Esta es una tarea de construcción socio-política en que los líderes tienen un rol esencial”, comenta.
Héctor Gaete aclara que el segundo pilar es objetivo y consiste en transformar a nuestra economía desde una basada en materias primas (commodities)  a otra basada en conocimiento.  “El valor de los commodities es muy vulnerable ante turbulencias, como ocurre con el cobre, cuyo precio cayó a la mitad en una semana”, puntualiza.
Para concretar esta transformación son determinantes dos aspectos. Primero una adecuada articulación entre sectores público, académico-científico y privado,  “porque es necesario innovar mediante ciencia y tecnología al servicio de una gestión pública moderna y ágil y de una producción de alto valor agregado”. En segundo término, aumentar en cantidad y calidad el capital humano avanzado; es decir doctores, magíster y profesionales y técnicos de alta especialización. De ahí que concluye que el ámbito académico es un escenario estratégico para materializar la competitividad de la región y del país.
Para Manfred Max-Neef, el problema fundamental radica en el hecho de que estamos en el Siglo XXI, con problemas que no tienen precedente, y que son abordados con una visión económica neoclásica, es decir, del Siglo XIX. A su juicio, es preciso replantear radicalmente la enseñanza de la economía y, desde luego, su práctica.
El economista propone que una nueva economía debiera sustentarse en cinco postulados fundamentales y en un principio valórico trascendental. “En primer lugar, la economía está para servir a las personas y no las personas para servir a la economía. El segundo postulado plantea que el desarrollo tiene que ver con personas y no con objetos. En tercer término sostiene que el crecimiento no es lo mismo que el desarrollo, y el desarrollo no precisa necesariamente de crecimiento. El cuarto postulado apunta a que ninguna economía es posible al margen de los servicios que prestan los eco-sistemas. Y, finalmente, la economía es un subsistema de un sistema mayor y finito, la biosfera; por lo tanto el crecimiento permanente es imposible”.
Respecto al principio valórico, Max-Neef afirma que éste se relaciona con que ningún interés o proceso económico puede estar por sobre la reverencia por la vida. “Lo que tenemos hoy, uno por uno, es exactamente lo contrario. Pienso que si lo propuesto se tomara en cuenta, estaríamos en un mundo más justo, equitativo y respetuoso”, concluye.

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